Él

Mi vida había empezado a cambiar. Él entró en ella sin preguntar. No me molestó ni me molestará nunca.

No sé muy bien si lo había planeado antes o simplemente la curiosidad le dijo que entrase a probar. Nunca lo sabré, supongo...

Él tiene esos ojos que tantas sonrisas me sacan con solo mirarme. Puede que esa mirada mejore cuanto mas cerca se encuentre él de mis labios. No lo sé...

Deseo el poder sentir sus manos acariciándome, rozando cada centímetro de mi piel, mientras sus labios desgastan mi cuello por segundos... Y que sus ojos me miren mientras me deshacen entre sus brazos...

Puede que todo sea un sueño y que no exista y que, al despertarme, inunde la cama con millones de lágrimas por creer, por un instante, que puede ser real...

Sueño o no, él es el motivo por el cual, estas lineas, os hacen recordar a esa persona que también os hizo o hace sonreír. 

Solo sé que él acelera mi corazón, me hace enfermar, sonreír, llorar, gritar, cantar, porque para mi, no hay otra persona capaz de conseguir lo que ha conseguido él. 

Quiero dedicarle todas mis palabras, escritas y dichas; quiero regalarle todos mis besos y caricias, habidas y por haber; quiero cantarle todas esas canciones, susurrando o tarareando; quiero decirle que, algún día, estaré a su lado.